Esto es porque simboliza las actividades diarias a las cuales estamos acostumbrados y, por lo tanto, no representan un generador de miedo o ansiedad ante el cambio, este temor es el que tenemos que doblegar para conseguir los objetivos que nos proponemos.
Entonces qué tal si hiciéramos una lista como ésta, por ejemplo:
- Menos televisión y más ejercicio.
- Menos perder el tiempo ante el computador y más capacitarse para obtener ganancias aprovechando las modernas tecnologías.
- Menos cigarrillo y más caminatas al aire libre.
- ... y la lista continúa con tus propias metas.
Debes tener una gran fuerza de voluntad y auto disciplina para romper tus propios esquemas y hacer los cambios necesarios para mejorar tu calidad de vida y la de tus seres queridos.
Voy a repetir una frase que le escuché al experto en Google AdWords, Carlos Gallego: "Lo que distingue a los triunfadores de los demás no es el deseo de ganar sino el deseo de prepararse para ganar".
Hay un refrán que reza así: "Todo el mundo quiere ir al cielo pero nadie quiere morirse".
Hay que estar dispuesto a pagar el precio para tener mejor salud, más estabilidad económica, más tiempo dedicado a nuestros seres queridos, así que ponte en acción y haz que el cambio para mejor sea tu nuevo modo de vida y no solamente parte de tus conversaciones.
